Relatos encontrados

Ya no sé si tus ojos eran azules con motas verdes o verdes con relámpagos azules.
Sí que aún conservo cada momento, caricias y besos.
Sí que guardo tus palabras y tus malas caras.
Claro que recuerdo tu seriedad y tu aparente madurez.
¿ Ciertamente ?
Fuiste lo mejor y al mismo tiempo lo peor que me ha sucedido nunca.
Hice mil locuras por tu boca y habría hecho otras mil más si aquello hubiera durado.
¿ Arrepentimiento ?
Dolor.
Y coraje.
Tanto que se comprime aquí en mi pecho y no me deja respirar.
En ocasiones, solo en ocasiones, (confesaré que a cada tres minutos) rememoro tus palabras y me dan ganas de gritar.
'' Nadie te va a dar lo que yo te doy.''
Y qué maldita razón tenías, subnormal.

¿ No pudiste sencillamente decirme adiós para siempre?
No. Tuviste que recordarme una y otra vez que siempre serías tú el que llenara mis noches de desvelos y mis días de deseos.
Tanto me gustó la encimera de tu cocina que recuerdo el frío que sentía en las piernas cuando me colocaste sobre ella.
Pero ¿ sabes qué ? También recuerdo que acallaste ese frío con un beso y mil caricias en mi cuerpo.
Y las noches , y la velocidad de tu 'caballo blanco' cuando me dejabas en casa.
Y las tardes y cada ilusión que me regalabas.